La noche de la empresa vasca 2022
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I+D en el País Vasco: menos surfistas, pero más diestros

El estancamiento de la I+D en el País Vasco se debe al menor número de empresas que abordan estas actividades, a pesar de que el esfuerzo inversor de estas crece con fuerza.

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Jesús Galindo
1/9/2020
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La I+D en el País Vasco, a pesar del ligero crecimiento de los últimos tres años, se ha estancado en el 1,85 por ciento del PIB. Este termómetro ‘macro’, sin embargo, conviene destriparlo para saber qué circunstancias impiden la expansión de un área considerada clave para la empresa.

El análisis de Empresa XXI de la amplia estadística del Eustat muestra que el factor que más frena la I+D es la reducción de las empresas que se lanzan a surfear las olas de la innovación. Curiosamente, estas compañías aumentaron su gasto medio de forma destacada en los últimos años. La prueba de este cambio aflora al analizar la situación en 2018 respecto a 2012, anterior año récord en el gasto empresarial de I+D en el País Vasco.

En este sexenio, los establecimientos con actividades de I+D se redujeron un 10,7 por ciento, de 1.578 a 1.409. Sin embargo, estos atletas de la I+D acumularon un gasto superior en un 3,7 por ciento, de 1.041 a 1.080 millones de euros. El cruce de los datos anteriores refleja que el gasto medio por establecimiento repuntó el 16,1 por ciento en 2018 respecto a 2012, saltando de 659.821 euros a 766.351. Como referencia, en los tres últimos años, 2015-2018, el salto fue del 28 por ciento, un avance fruto de las mayores ayudas a los grandes grupos y de la recuperación en la generación de excedente por parte de las empresas, lo que animó nuevas incursiones en la I+D.

LA CLAVE DIMENSIONAL

Lo más llamativo es que en el País Vasco este avance en el gasto en I+D no se debe a las grandes empresas -su número es escaso y bajas como Fagor Electrodomésticos se notan-, sino a los grupos de 50 a 99 empleos y de 100 a 249, en parte por concentrar las más importantes empresas especializadas en ‘Actividades de I+D’. Estos dos grupos lideraron el avance de fondos destinados a I+D entre 2012-2018, al marcar alzas del 72,1 por ciento y del 28,7, respectivamente. Ambos grupos, además, se mostraron más resistentes en el mantenimiento de establecimientos con gastos en I+D. Los de 50-99 se redujeron un 1,9 por ciento; y los de 100-249 repuntaron un 1,7 por ciento.

En ese mismo período, la debacle se produjo en los segmentos más grandes. La caída de establecimientos de 250-499 empleos con acciones de I+D fue del 22,0 por ciento; la de 500-999, del 26,9 por ciento; y la de más de 1.000, del 38,5 por ciento. Teniendo en cuenta que estos grupos se movieron en una horquilla media de gasto en I+D entre 2,6 y 12 millones de euros en 2018, no es difícil entender el frenazo que para la I+D supone la renuncia de estos actores a la innovación tecnológica, al igual que para su futuro. Proporcionalmente, la reducción de los grandes superó a las microempresas con I+D, que sufrieron un recorte en el sexenio del 20,8 por ciento, de 727 a 576 establecimientos.

Como referencia, el gasto medio por establecimiento en 2018 sobre 2012 creció un 75,4 por ciento en los de 50-99 empleos; un 35,3% en los de 500-999 empleos; un 26,5% en los de 100-249; un 16,1% en los de menos de 20; y un 14,2% en los 20-49 empleos; mientras que en lo de más de 1.000 se redujo un 20,8 por ciento.

LA SECTORIZACIÓN

El análisis de los fondos destinados a I+D por sectores arroja mayores diferencias, detectándose cuáles son los grupos que pierden protagonismo en la industria vasca, y también los que lo ganan. Si se analizan los grupos con mayor gasto medio por establecimiento, solo cuatro sectores superaron la cota de un millón de euros. El liderazgo correspondió a Material de transporte, con 4,0 millones de euros en 2018; seguido de Actividades de I+D, 2,4 millones; Aparatos domésticos, 1,521 millones; y Química y refino de petróleo, 1,4 millones de euros.

Además, entre 2012 y 2018, dos de estos cuatro grupos redujeron el número de establecimientos con I+D: Aparatos domésticos un 60,0 por ciento, de 5 a 2, baja que llegó acompañada de una reducción del 91,3 por ciento en el gasto absoluto como consecuencia del hundimiento de Fagor Electrodomésticos; mientras que en Material de transporte la merma fue del 33,3 por ciento, de 42 a 28. Por su parte, en Química y refino aumentaron los establecimientos un 9,5 por ciento, de 42 a 46; y en Actividades de I+D, un 8,6 por ciento, de 152 a 165. Como hemos señalado, la reducción del número de empresas con I+D se compensó con un mayor gasto de las supervivientes, pero esta mengua aparece como un grave problema a medio y largo plazo, y en casi todos los sectores.

LOS MÁS DINÁMICOS

La estadística de Eustat, así, recoge que solo 5 de los 19 sectores aumentaron los establecimientos con I+D, lo que podría indicar que son los grupos con mejor evolución en los últimos años: Química y Refino (+9,5%), Otra maquinaria (+15,2%), Material electrónico (+4,8%), Material de precisión (+32,3%) y Actividades de I+D (+8,6%). En sentido contrario, las mayores bajas correspondieron a Aparatos domésticos (-60,0%), Industria no metálica (-40,9%), Material de transporte (-33,3%), Otros servicios (-30,0%), Caucho y plástico (-18,5%), Metalurgia (-8,0%), o Material eléctrico (-13,2%).

Este artículo fue publicado por Empresa XXI en el Suplemento "Tecnología Vasca 2020".

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