Acomete un plan de 1 millón de euros hasta 2022, con el que también entrará en agricultura y biomedicina
La ingeniería Ekolber se encuentra inmersa en plena fase de crecimiento tras consolidar su proyecto empresarial, basado en la producción de un nuevo biomaterial termoplástico obtenido mediante tratamiento mecánico de materiales ricos en colágeno (piel de animal y similares), que permite producir bioplásticos a través de formulaciones adaptadas a requerimientos de numerosos sectores. El respaldo que le proporciona Viscofan como accionista de la compañía desde 2019 ha impulsado a Ekolber a emprender un plan inversor hasta 2022 de cerca de un millón de euros para garantizar un ritmo adecuado de producción. Según explican, durante el presente ejercicio ejecutarán diversos desembolsos para la adquisición de equipos de proceso, como trituradoras, peletizadoras y secadoras, con el objetivo de llegar a producir una tonelada diaria de su material ‘Ekomat’ para el sector alimentario. Y de cara a los próximos ejercicios, el propósito es incrementar esa capacidad productiva hasta las 4 toneladas diarias, para lo que realizarán las consiguientes inversiones necesarias en instalaciones y maquinaria, aún por definir. De ese modo, abordarán el sector del packaging alimentario, uno de sus mercados objetivo que impulsará en lo sucesivo tras suscribir un acuerdo con una empresa que fabrica y distribuye este tipo de soluciones en el mundo para la comercialización de su producto. La agricultura es otro de los mercados prioritarios de Ekolber. Su plan de negocio parte del desarrollo de un producto de acolchados para invernaderos, que en estos momentos se encuentra en fase de validación con el propósito de lanzarlo al mercado en 2022. De forma paralela, trabajan en el proyecto Lanaland, una cooperación tecnológica en la que investigan usos alternativos de la lana, en concreto como sustitutivos de materiales plásticos. De ese modo, tratan de desarrollar soluciones innovadoras para la valorización de lana de ovino de las razas lecheras autóctonas, que hoy en día tienen carácter residual, con el fin de ofrecer nuevas oportunidades de crecimiento a las empresas locales desde el punto de vista de economía circular. Otro de los ámbitos en los que se enmarca gran parte de su actividad innovadora es el sector biomédico, ya que a futuro lo identifican como una oportunidad de valor para la compañía. Desde esa perspectiva, trabajan en la investigación de soluciones de fabricación aditiva de biomateriales para productos médicos a través del proyecto Hazitek BIO3D. Junto a las compañías Createch Medical, Domotek, 3R3D Technology Materials, Unikare Bioscience, Histocell y el centro tecnológico Tecnalia, Ekolber desarrolla un material por impresión 3D para la regeneración de piel y hueso, investigando el material Ekomat como excipiente para fármacos por 3D. A esa iniciativa se suma otro proyecto que llevan a cabo en el marco sanitario para el desarrollo de apósitos con propiedades antimicrobianas de matriz colágena con nanopartículas biológicamente activas. La ingeniería guipuzcoana Ekolber inició su actividad en 2015, ofreciendo a los clientes formulaciones ‘ad hoc’ para sustituir el plástico en la fabricación de sus productos, un innovador proyecto empresarial que fue reconocido en la vigésimonovena edición de los Premios Toribio Echevarria.
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