Aceros Ormazabal ha cumplido 50 años de historia industrial. “Un negocio de éxito”, manifiesta Juan Manuel Ormazabal, apoyado en incrementos sostenidos de producción y ventas, donde el mayor desafío para los próximos años es asegurar una rentabilidad acorde a un negocio especialista como el suyo, manteniendo una apuesta firme por disponer de los medios más innovadores del mercado.
Con esta máxima ha transcurrido medio siglo de trabajo en el que la empresa familiar se ha consolidado como un proveedor especializado en producto plano de calidad, con altos límites elásticos y espesores gruesos, en base a una estrategia en la que el crecimiento de los próximos años irá acompañado de una progresiva adecuación de las capacidades productivas, en línea con las necesidades del mercado y del mantenimiento de la competitividad.
Numerosos hitos han tenido lugar desde que José Agustín Ormazabal iniciara la actividad de comercio siderúrgico en Pasajes, a principios de los años 60, como un negocio generalista de distribución del acero que incluía toda la gama de productos: chapa, productos largos, redondos… Entonces, no existía especialización como tal. Pero ya en 1975, la visión del fundador anticipaba una evolución hacia la transformación y el procesamiento de los productos largos, que le llevó a trasladarse a Amorebieta, acercando su negocio a las plantas siderúrgicas que se desarrollaban en torno a la actividad de Altos Hornos de Vizcaya.
En 1993, tras el fallecimiento del fundador, sus hijos Juan Manuel y Lourdes continuaron con el negocio, fortaleciéndolo y avanzando en su desarrollo tanto en producto plano como en producto largo. Hasta 2007, cuando, coincidiendo con la incorporación del nuevo equipo directivo, el concepto de especialización tomó forma para convertirse en la esencia estratégica de la compañía.
En torno a esa estrategia, afrontaron dos fases de especialización. La primera, centrada en la apuesta por el negocio del producto plano, en detrimento de la división de producto largo. En ese punto de inflexión, se procedió a emprender un plan de renovación de equipos e incorporación de nueva maquinaria que acompañara al proceso de especialización, avanzando en la orientación hacia un producto de alta calidad y mayores espesores.
Una segunda etapa de especialización, en la que la implantación de la tecnología láser se imponía en el mercado, perfilando la hoja de ruta y las líneas de trabajo a desarrollar en los años siguientes. En el transcurso de ese plan de modernización de equipos, en 2016 decidieron implantar una novedosa línea de decapado ecológico que complementaba los procesos de limpieza y optimización de superficies, necesarios para garantizar el componente de calidad exigido en el mundo del acero en general,y del láser en particular. Posteriormente, siguiendo la misma estrategia de especialización focalizada en la tecnología láser, en los últimos años, la compañía ha culminado la renovación de sus medios productivos incorporando una línea de espesores medios de hasta 12 mm, y otra línea de espesores gruesos capaz de procesar bobinas de hasta 30 mm.
En la actualidad, tres generaciones comparten la visión actual del negocio que, a lo largo de los años, ha convertido a Aceros Ormazabal en un centro de servicios de referencia, especializado en corte transversal de planchas de acero, con una gama de productos para el procesamiento de altas calidades, puntero en el sur de Europa, a nivel de planitud, distensionado y limpieza superficial. Tres generaciones comprometidas con el futuro de la compañía y los desafíos que alberga un mercado volátil, marcado por la incertidumbre.
Y un propósito, atender las necesidades de los clientes, cada vez más exigentes, que demandan acero de calidad en los procesos de transformación que acometen en sus instalaciones cada vez más automatizadas.
En este contexto actual, mantener el tándem ‘crecimiento-rentabilidad’ guiará la hoja de ruta para seguir cumpliendo otros 50 años de éxito, en los que la optimización de los medios productivos, la incorporación de sistemas de automatización y nuevas tecnologías, así como la implantación de procesos de digitalización e inteligencia artificial, acompañarán el desarrollo de la compañía y el mantenimiento de la competitividad para asegurar su posicionamiento internacional en un plan a tres años, cuyo objetivo es garantizar un alto estándar de calidad lo más sistematizado posible.
Un recorrido que también pondrá en valor al equipo, cuidando su evolución profesional, impulsando el desarrollo de nuevas capacidades y apostando por el talento como eje del desarrollo futuro.
El proceso integral de transformación digital contempla el desarrollo de diversos proyectos, algunos de los cuales están vinculados con la sistematización de la calidad, y otros se centran en la mejora del servicio al cliente. En el plano productivo, el compromiso de mejora se focaliza en ampliar la gama de producto y el rango de espesores y calidades. En este sentido ya es capaz de comercializar chapa láser de hasta 50 mm de espesor y está desarrollando una gama de aceros especiales. Al tiempo que, en paralelo, analizan la posibilidad de expandir la capacidad productiva mediante nuevas instalaciones, en función de la evolución de la demanda y las necesidades operativas, como parte de una estrategia de crecimiento sostenible.
El grado de especialización alcanzado en estos años ha ampliado el radio geográfico de Aceros Ormazabal que, en la actualidad, suministra a los mercados de España, Portugal y Francia, sin descartar la prospección de otros mercados geográficos. Sin embargo, de cara al futuro tan importante es como desafío, afrontar la incertidumbre que influye en la actividad de los clientes, como la complejidad de la importación, donde las restricciones arancelarias en el contexto mundial y la evolución de la normativa europea están condicionando las políticas de compra, configurando un escenario donde la prudencia será el mejor consejero para los próximos dos años.
Frente a la volatilidad del precio del material y el arancel que dificulta las previsiones y los resultados, así como un mercado cada vez más exigente, donde sectores como ferroviario o carrocerías industriales demandan más calidad de producto, Aceros Ormazabal orienta su estrategia de innovación hacia una mejora continua de los procesos en el ámbito de la distensión, de la limpieza y de la medición de la desplanitud, comprometido con el cliente en aras de incrementar la productividad de su actividad como transformador por láser.
Otro aspecto que define la visión de la compañía para los próximos años es la transición ecológica que afecta a los procesos industriales y que, en su caso se materializa en la optimización de las operaciones de compra y utilización de acero verde, así como en la novedosa tecnología de granallado que aplican en la línea de decapado ecológico, aún referente en el mercado que, tras la última actualización en 2024, es capaz de decapar hasta 50 mm de espesor.
En esta realidad, Aceros Ormazabal avanza con paso firme en el despliegue de una estrategia asentada en la consolidación de unos objetivos de crecimiento sostenidos, asegurando el equilibrio entre el volumen y la rentabilidad, un tándem imprescindible para afrontar otros 50 años de éxito, así como una estructura resiliente capaz de atraer y retener el talento especializado.
Porque tan importante es llegar, como mantenerse.
Aceros Ormazabal nace de manos de su fundador, José Agustín Ormazabal, como centro de servicio del acero generalista dirigido a sectores con consumo de acero común.
En su apuesta por la especialización, este año marca el comienzo de un gran hito en la trayectoria de Aceros Ormazabal, una nueva etapa en la que la compañía decide centrarse en la comercialización de productos planos.
Coincidiendo con la entrada del nuevo cuadro directivo, la especialización toma forma en las instalaciones de Amorebieta, donde se impulsa un plan de renovación de equipos que acompañará su evolución hacia un producto de alta calidad y mayores espesores.
En paralelo al desarrollo de la tecnología láser, la compañía fue pionera en la instalación de la línea de 2020x20, permitiendo poner en el mercado material procedente de bobina de máximo espesor.
Conscientes de la importancia de un buen acabado superficial para algunos materiales y procesos de corte por láser, unido a la necesidad de encontrar alternativas más sostenibles al decapado tradicional, implantan una novedosa línea de decapado ecológico, fruto de un ambicioso proyecto de I+D.
Continuando con la estrategia de especialización focalizada en la tecnología láser, en los últimos años, la compañía ha culminado la renovación de sus medios productivos incorporando una línea de espesores medios de hasta 12 mm, y otra de espesores gruesos, capaz de procesar bobinas de hasta 25 mm.
La mejora implementada en la fase de aplanado les permite procesar producto de muy alta calidad y de hasta 30 mm de espesor. Esto, unido a la ampliación de gama de producto decapado hasta 50 mm le convierte en un centro de servicio especializado en el procesamiento deaceros de alta exigencia.
Aceros Ormazabal celebra el 50 aniversario de su fundación. La compañía ya es capaz de comercializar chapa láser de hasta 50 mm de espesor y actualmente desarrolla una gama de aceros especiales.
La digitalización de todos los procesos, vinculada a la sistematización de la calidad y la mejora del servicio al cliente, es parte del plan de futuro. Al tiempo, analizan la posibilidad de expandir la capacidad productiva con nuevas instalaciones, en función de la evolución de la demanda y las necesidades operativas, en línea con su estrategia de crecimiento sostenible.
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